cropped-Logo-AzulyPunto.png

DECLARACIÓN UNIVERSAL DE DERECHOS HUMANOS

«Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en
dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia,
deben comportarse fraternalmente los unos con los otros».

Hoy la Declaración Universal de Derechos Humanos cumple 73 años.

El 10 de diciembre de 1948 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclama los derechos humanos fundamentales que deberían protegerse en el mundo entero, los que incluyen a toda persona por su sola condición de ser humano.

Por primera vez en la historia de la humanidad representantes de todas las regiones del planeta lograron un texto tan humanamente ambicioso que siete décadas después continúa siendo un ideal, una aspiración, en particular para amplias regiones del mundo.

Elaborada por representantes de todas las regiones, con diferentes antecedentes culturales y jurídicos, la Declaración fue proclamada por la Asamblea General de ONU en París, a través de su Resolución 217 A (III), «como un ideal común para todos los pueblos y naciones.» La Declaración establece, por primera vez, los derechos fundamentales que deben protegerse en el mundo entero y ha sido traducida a más de 500 idiomas.

A la Declaración Universal, que originalmente no tuvo carácter de tratado sino más bien de guía y orientación, luego se sumaron tratados vinculantes, convenciones y pactos.

Hoy existen nueve tratados que conforman lo que se conoce como instrumentos internacionales básicos en materia de derechos humanos y ha inspirado la adopción de más de setenta tratados de derechos humanos. 

Los principios básicos sobre los que descansan los derechos humanos son su universalidad, interdependencia e indivisibilidad pues constituyen un cuerpo o sistema en el que cada uno de los elementos tienen igual importancia, se retroalimentan y son inseparables, en tanto los valores y derechos innatos del homo sapiens se entienden como indivisibles. A los anteriores principios se suman la igualdad y la no discriminación de ninguna clase.

O sea, los derechos sociales, económicos y culturales no son más importantes o no sustituyen a los derechos civiles y políticos, o viceversa, sino que constituyen un todo único, como mismo un ser humano no tiene que dejar de comer para pensar y expresarse sin ser sancionado o no tiene porqué negar sus derechos de asociación porque se le garantizan accesos a la educación y salud universales.

La aspiración es alcanzar la mayor cantidad de derechos y garantías para todos los seres humanos. Estén donde estén. Vivan donde vivan.

Enarbolar y defender los derechos humanos de y para todos es de los más hermosos y nobles objetivos que pudiera abrazar cualquier persona, grupo o sociedad.

Ignorar, postergar o negar su importancia solo es concebible en mentes y ordenamientos sociales poco sensibles, despóticos y totalitarios.

Cuba estuvo entre los 48 Estados que acompañó y aprobó la Declaración Universal aquel 10 de diciembre de 1948 (48 a favor, 8 abstenciones, 2 ausentes, 0 en contra)

Bien vale la pena la lectura y estudio de la Declaración Universal.

Acá: https://www.un.org/es/universal-declaration-human-rights/

0
Compartir en:
Sitos de interes
Te puede interesar:

SED DE MAL

Más de seiscientos artistas de todas las manifestaciones y generaciones han expresado recientemente su firme rechazo a las autoridades culturales del país al considerar que,

BIDEN, EL GOP Y EL ESTADO DE LA UNIÓN

El Presidente Joe Biden, los republicanos y el Estado de la Unión. El presidente de Estados Unidos pidió a sus colegas del Congreso apoyo para objetivos que con toda seguridad caerán en saco roto. Demócratas y republicanos tienen hoy dos visiones de la política, la sociedad y el mundo bastante contrapuestas.

REALPOLITIK A LA CUBANA, PORTAZO A UCRANIA

El apoyo diplomático de Cuba a Rusia en su invasión a Ucrania es coincidente con las deudas republicanas, democráticas, de renovación del sistema político cubano, así como de la carencia de objetivos internacionales que respondan a los intereses de la nación y no a los de un Partido único en el poder.